El verano se ha terminado y nosotros seguimos como siempre, trabajando para ofrecer a nuestros clientes calidad, innovación y tradición en la elaboración de los mejores chocolates.
Una tradición que se remonta hasta 1931, año en el que Hilario y Antonia deciden lanzarse a la aventura de regentar una pequeña chocolatería en el barrio de Ruzafa. Desde entonces ha llovido mucho, y el mundo ha cambiado bastante. También Trufas Martínez, que tras varias generaciones dedicándonos a la elaboración del mejor chocolate, hemos sabido adaptarnos a los tiempos y crecer con ellos, pero sin olvidarnos en ningún momento de nuestros orígenes.
Eso es lo que hace que nuestros productos sean tan especiales: aúnan calidad, tradición e innovación a partes iguales. Y no es fácil, por eso nos sentimos tan orgullosos.
Ahora, después del verano, es cuando para muchos realmente empieza el año, la nueva temporada: tiempo para que nuevos proyectos e ideas se pongan en marcha.
Por nuestra parte, nosotros vamos a seguir empeñados en mantener nuestras señas de identidad, y en seguir trabajando duro para darle a nuestros clientes el producto que se merecen, nuestro producto, un producto que es la culminación de más de 85 años elaborando en Valencia los mejores chocolates y, de paso, endulzando un poco la vida de muchas personas.
Esperamos seguir haciéndolo, por lo menos, otros 85 años más.